El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, negó este miércoles que su gobierno pretenda expropiar los terrenos de Sac-Tun (antes Calica), filial de la estadounidense Vulcan Materials, en el Caribe mexicano, tras declaraciones del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.
“No estamos expropiando, es una clausura porque no podemos quedarnos con los brazos cruzados cuando se está violando la ley en nuestro país y se está destruyendo nuestro territorio”, apuntó el mandatario durante su conferencia de prensa matutina.
El presidente se refirió así a las declaraciones de Blinken, quien el martes advirtió de que la “expropiación” del terreno de la empresa Vulcan Materials de Playa del Carmen “no es una buena forma de atraer inversiones”.
Al respecto, López Obrador señaló que su gobierno no quiere traer inversores extranjeros “a cualquier precio, ni mucho menos a que traigan inversión para destruir el territorio”.
“No, mejor que no vengan o que se vayan a otra parte”, zanjó.
El mandatario mexicano afirmó que desde los gobiernos de Carlos Salinas de Gortari y de Ernesto Zedillo, Vulcan recibió permisos para extraer grava y arena junto al centro vacacional Xcaret.
“Empiezan a extraer el material, violan todas las leyes ecológicas y todo ese material se lo llevan a Estados Unidos para arreglar las calles de sus ciudades, destruyendo nuestro territorio“, reclamó.
Por ello, dijo que al comienzo de su gestión intentó dialogar con la empresa.
“Hablamos con ellos y les pedimos que ya no siguieran cometiendo ese ecocidio, y al mismo tiempo la Procuraduría del Medio Ambiente clausuró el banco. Ya lleva el banco como dos o tres años clausurado”, comentó López Obrador.
Afirmó que, incluso, su gobierno ofreció comprar la parte que ya estaba afectada del terreno, que corresponde a unas mil 500 hectáreas, donde iban a aprovechar las “albercas naturales” que habían dejado con las excavaciones y las convertirían en reserva ecológica.
“Les ofrecimos más de 2 mil millones de pesos. Se hizo un avalúo y les mandamos a decir que les comprábamos la parte impactada porque tienen como mil 500 hectáreas de selva de reserva“, explicó.
No obstante, reveló que la empresa no aceptó.
“Lo que yo sostengo es que sería una aberración que se permitiera seguir destruyendo el territorio con un banco de materiales para construir las carreteras en Estados Unidos“, enfatizó.
El conflicto con Vulcan Materials, que tiene una concesión hasta 2037, causa un roce comercial con Estados Unidos, donde Blinken ha advertido en diversas ocasiones la “preocupación” de la Casa Blanca por el caso, la más reciente este martes.
Desde 2022, López Obrador ha insinuado la intención de expropiar esos terrenos, mientras que en noviembre de 2023 la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) señaló que las 2.400 hectáreas pertenecientes a Vulcan Materials están en proceso de ser declaradas Área Natural Protegida.
Con información de EFE/LATINUS.